¿Pero por qué yo? ¿Pero por qué a mí? ¿Por qué, por qué, POR QUÉÉÉ?
¿Te suenan familiares estas frases? ¿Las acostumbras usar cuándo las cosas parecen “salirte mal”?
Muchas mujeres desafortunadamente vivimos o hemos vivido alguna vez estancadas en los “¿porqués?”, creyéndonos víctimas del destino y pasándonos una vida tratando de entender la razón por la cual “nos suceden” las cosas.
La verdad es que todas tenemos derecho a vivir nuestra vida como queramos, pero si existe la posibilidad de disfrutarla en lugar de sufrirla, ¿por qué no hacerlo?
Todo comienza con tomar conciencia de que nosotras somos creadoras de nuestra propia vida. Una vida en la cual, por principio, solamente dos cosas son seguras: (a) que un día nacimos y (b) que un día esta experiencia llamada vida va a terminar en la muerte, transición o en lo que tu creas que va a suceder al final.
Piensa en estos dos eventos como dos puntos o lugares en un mapa. De un punto al otro puedes llegar usando miles de rutas diferentes y aun así siempre llegaras AL MISMO lugar. Puedes elegir un camino escabroso, o uno empinado, o uno “de bajadita”, o una combinación de todo un poco. A fin de cuentas es TU camino. Tú eliges la ruta. Tú escoges como quieres vivir esa experiencia que es tu vida.
De la misma manera TÚ puedes escoger la razón por la cual las cosas no salen como tú quieres que salgan en tu camino.
¿Se descompuso el auto y te quedaste tirada en medio de la carretera en un día lluvioso? En lugar de quejarte, sufrir y preguntarte ¿Pero por qué a mí me pasan estas cosas? qué tal si mejor tu misma decides el PARA QUE te sucedió esa “desgracia”. Por ejemplo, “se me descompuso el coche PARA QUE en el futuro recuerde que tengo que ser mas organizada y que debo llevarlo a su servicio cuando le toca y no solamente cuando me lo dice mi marido”.
Si tú misma decides el PARA QUE de las experiencias que vives en tu vida, ya sean estas agradables o no tanto, entonces significa que realmente estas en control de ella y que utilizas todo tu poder creativo para SER quien TU deseas ser.
Cuando reflexionemos sobre los porque,entonces entenderemos los paraque.
Las escrituras nos enseñan sobre esto A LOS QUE AMAMOS A DIOS TODAS LAS COSAS NOS ENSEÑAN PARA BIEN
Todas las situaciones que nos ocurren en la vida tienen su parte positiva, solo se le pide a dios que nos la manifieste para aprender de ella. Asi como dicen “No hay mal que por bien no venga”… no necesitamos un “por qué” sino un “para qúe me sucedió esto”
Me encanta todos los articulos, que publican, en especial éste, es muy cierto que siempre nos preguntamos por que a mi?-
saludos.
laura matheus
cabudare edo. lara
venezuela
Me he repetido esas hermosas palabras desde que tenía 37 años. Hoy vivo en el quinto piso y me siento muy bien porque tengo la seguridad que el destino se lo prepara una misma con un criterio de apropiación de sí misma, con conciencia, responsabilidad y autorrespeto. No podemos continuar pidiendo permiso para ser o tomar una decisión y así mismo debemos creer en que los seres queridos que nos rodean también deben tener una formación consecuente y madura desde jóvenes. Nosotras damos el ejemplo cuando en vez de quejarnos de la vida enseñamos la fortaleza de recibir todas las experiencias como un aprendizaje. Agradezco este bello artículo.
ES CIERTO QUE NOS PREGUNTAMOS ¿POR QUÉ A MÍ ME PASA ESTO?, POR QUE CREEMOS QUE TODO LA VIDA ES LA LEY DE LA “CAUSA Y EFECTO”, SI NO SOMOS MALAS PERSONAS Y TRATAMOS DE ACTUAR CON BIEN Y NOS PASAN COSAS NO DESEADAS; ES CUANDO NOS HACEMOS ESA PREGUNTA; MÁS SIN EMBARGO, AL ANALIZARLAS DEBERÍAMOS APLICARNOS EL REFRÁN DE “NO HAY POR CIEGO QUE EL QUE NO QUIERE VER”, NOS PASAN LAS COSAS PARA QUE NOS DEMOS CUENTA DE QUE ALGO NO ANDA BIEN Y QUE DEBEMOS ESTAR ALERTAS PARA TOMAR LAS RIENDAS EN NUESTRAS MANOS Y CUANDO NOS DEMOS CUENTA DE ELLO, YA NO NOS PREGUNTAREMOS ¿POR QUÉ? AHORA PREGUNTAREMOS ¿PARA QUÉ?.
Muy bueno tu artículo, a muchos les sucede a menudo pero así se aprende con tropezones para reflexionar de lo que realmente deseas.