“Tenía tanto que hacer que ya ni me dio tiempo de llegar a la reunión de mis amigas…”, “corrí todo el día pero no me alcanzaron las horas para llamarle a mi madre…”, “llegue tan tarde de trabajar que ya estaban dormidos los niños…”
Cuando vivimos nuestra vida enfocadas solamente en lo que deseamos alcanzar en el futuro nos arriesgamos a que, en el deseo de llegar pronto a ese lugar que pensamos que queremos llegar, lo único que logremos sea sentir que nos pasamos la vida corriendo.
Corremos cada vez más rápido porque así sentimos que nos acercamos más pronto a nuestro objetivo. Vivimos corriendo aunque tropecemos, pues creemos que esos tropiezos son los retos que nos hacen levantarnos con más ganas de seguir corriendo. Corremos porque creemos que estar en constante movimiento es mejor que no hacer nada.
Pero la mayoría de las veces por hacer de nuestras vidas una carrera hacia el futuro nos olvidamos de lo que realmente vale la pena en el PRESENTE.
Nos olvidamos de las personas que están a nuestro alrededor. Nos olvidamos de detenernos de vez en cuando por un momento a disfrutar del paisaje. Nos olvidamos de conectarnos con nosotras mismas. Perdemos de vista esas “pequeñeces” que son las que en realidad enriquecen nuestra vida… ¡y todo por vivirla deprisa!
El secreto para SER realmente feliz es vivir y disfrutar plenamente de cada momento PRESENTE.
Cuando el futuro – en lugar de tu momento presente – se convierte en tu máxima prioridad, lo único que estás haciendo es desgastando tu energía para “ganar” una carrera que ni siquiera existe.
Esa cita de que nos pasamos la vida corriendo solo para alcanzar metas en el futuro no es cierto en mi caso personal y debido a la dificil situacion economica , cada dia hay que correr muchisimo para conseguir lo del arriendo lo de la comida lo de los servicios los colegios porque si yo me detuviera a admirar cada dia o a divertirme un poco creo que al dia siguiente no tendria dinero para enviarle onces a mis hijos al colegio …….. en este corre y corre casi no hay tiempo de siquiera de descansar …… entonces ni siquiera hay en mente un sueño para el mañana ….!!!!!!!
Hola Luz Stella!
Tienes razón, todas tenemos obligaciones en esta vida, pero también todas gozamos del derecho de decidir si hacemos que el resultado futuro de esas obligaciones sea nuestro único enfoque en la vida.
Por ejemplo, tu tienes la opción de decidir si durante tu jornada laboral te la pasas pensando en la hora que vas a salir de tu trabajo o si encuentras una forma para disfrutar el momento y lo que haces en tu trabajo. Un pequeño detalle basta. Quizá sea la sonrisa de una compañera, o la satisfacción de una tarea bien hecha en ESE MOMENTO.
Esa es la clave de la felicidad … no agobiarnos en el que “corre corre corre porque hay que cumplir y no merezco descansar”…. no se trata de descansar sino de aprender a DISFRUTAR y a APRECIAR lo que hacemos y sobretodo lo que SOMOS.
Un abrazo,
Blanca
yo entiendo que la vida es un constante corre corre, pero no por mucho tratar de llegar a prisa, nos garantiza una vida plenamente feliz,yo prefiero seguir con pausas y poder disfrutar mas plenamente,las pequeñeses que aveces ignoramos, y son aquellas que nos hacen mas felices. poco a poco tambien podemos llegar lejos, la prisa solo nos hace olvidar toda las garantias, que nos ofrece vivir mas despacio, la vida es una sola y cada dia trae su afan,tenemos que vivir el hoy, porque el mañana es inseguro..poco a poco tambien llegamos..
¡Así es Gloria! La vida es una aventura en la que hagamos lo que hagamos llegaremos SIEMPRE a nuestro destino.
El pasado no existe, el futuro no existe… todo lo que existe es ESTE momento y depende de cada una de nosotras si decidimos o no aprender a disfrutarlo y a apreciarlo por lo que ES.
Un abrazo
Blanca
ya con el ritmo de vida que uno lleva no queremos darnos tiempo para disfrutar de la maravilla de la naturaleza o de nuestras propias familias nos hemos acostumbrado a vivir de prisa y por consiguiente a no disfrutar de lo que tenemos el diario vivir de hoy en día es… apúrate la hora nos gana…para todo hasta con los niños.a esto se suma lo caótico que el mundo de hoy se nos presenta.con tanta prisa no disfrutamos de nada hasta nuestros hogares se a convertido en que llegamos solo para dormir.que difícil)…….saludos.
vivimos una vida,con tanta rapides q se nos olvida vivir.
algunas veces ando de esa manera,pero me detengo y me pongo a orar y le pido al señor jesus que administre mi tiempo,y cuando no puedo hacer algo lo dejo asi y al siguiente dia lo hago,el afan no es bueno.aunque las cosas cotidianas nos carguen a prisa no debemos dejar que eso nos controle.
comparto los comentarios anteriores y en este momento estoy en mi segunda etapa de la vida,por que digo esto por que mis hijos estan grandes y los crie trabajado 12 horas x dia x que no tenia otra eleccion a pesar de que elegimos muchas veces no tenemos opcion mas que una pero vivi el dia y disfrute y hoy disfruto aun mas la vida lo bella que es, aprendi y lo empleo que no va en la cantidad sino en la calidad del tiempo que brindemos y nos brindamos ,salud para todos¡¡¡
És cierto que vamos demasiado deprisa por la vida, y tenemos que aprender a ralentizarnos. Queremos correr siempre, y eso no hay cuerpo que lo aguante. La cosa es que corremos, pero tampoco sabemps dónde vamos…. Hay que disfrutar lo que haces en el momento que lo haces, sea una obligación (aunque parezca mentira) o un hobbie. No hace falta querer hacer mil cosas para ser feliz. Se puede ser feliz con muy poco.
Tan cierto, yo ya pase los 40 y en un tiempo entre los 30 y algo a los cuarenta he querido hacer muchas cosas y siento en verdad que he corrido detras de nada y que mis fuerzas se han devilitado, me gusta el articulo y es rael totalmente!!