Siempre he dicho que la edad es un número que no significa nada. Lo verdaderamente significativo es lo que decidimos hacer con los años de que tenemos. Cada una de nosotras elige si el ser una mujer de 40ymas es una ventaja o una desventaja, una tragedia o una bendición.
Todo es cuestión de perspectiva.
Tu edad no te hace ni vieja ni joven, pero la forma en que has vivido los años que has estado en este mundo es lo que te hace una persona culta que se ha dedicado a atesorar conocimientos adquiridos que no son tuyos sino de los demás, o una persona sabia que se ha enfocado en vivir plenamente su experiencia interior en cada momento presente.
También puedes elegir ser un balance entre una persona culta y una mujer sabia sin miedo a SER quien tu deseas ser, como lo describe hermosamente el gran escritor portugués José Saramago en el texto que comparto con ustedes a continuación.
Espero que disfrutes leyendolo, porque como Samargo bien dice ¡tu edad es la que sientes y no la que tienes!
Mañana es la única utopía
Por: José Saramago, Premio Nobel Literatura 1998
Frecuentemente me preguntan que cuántos años tengo… ¡Qué importa eso! Tengo la edad que quiero y siento. La edad en que puedo gritar sin miedo lo que pienso. Hacer lo que deseo, sin miedo al fracaso, o lo desconocido. Tengo la experiencia de los años vividos y la fuerza de la convicción de mis deseos.
¡Qué importa cuántos años tengo! No quiero pensar en ello. Unos dicen que ya soy viejo y otros que estoy en el apogeo. Pero no es la edad que tengo, ni lo que la gente dice, sino lo que mi corazón siente y mi cerebro dicte. Tengo los años necesarios para gritar lo que pienso, para hacer lo que quiero, para reconocer yerros viejos, rectificar caminos y atesorar éxitos.
Ahora, no tienen por qué decir: Eres muy joven, no lo lograrás.
Tengo la edad en que las cosas se miran con más calma, pero con el interés de seguir creciendo. Tengo los años en que los sueños se empiezan a acariciar con los dedos, y las ilusiones se convierten en esperanza. Tengo los años en que el amor, a veces es una loca llamarada, ansiosa de consumirse en el fuego de una pasión deseada. Y otras en un remanso de paz, como el atardecer en la playa.
¿Qué cuántos años tengo? No necesito con un número marcar, pues mis anhelos alcanzados, mis triunfos obtenidos, las lágrimas que por el camino derramé al ver mis ilusiones rotas… valen mucho más que eso.
¡Qué importa si cumplo veinte, cuarenta, o sesenta! Lo que importa es la edad que siento.
Tengo los años que necesito para vivir libre y sin miedos. Para seguir sin temor por el sendero, pues llevo conmigo la experiencia adquirida y la fuerza de mis anhelos.
¿Qué cuantos años tengo? ¡Eso a quién le importa! Tengo los años necesarios para perder el miedo y hacer lo que quiero y siento.
Por cierto… ¿sabías que José Samargo escribió la que fue su mas grande novela a los 60 y encontró al amor de su vida a los 63?
Que bonito 🙂
estoy de manteles largos como decimos en mexico y si estoy muy agradecida con mi dios por regalarme el tesoro mas grande que es la vida. gracias amigos de 40 y mas los quiero…<3
POR FIN SE CUANTOS AÑOS TENGO.
Es muy bella, gracias por compartir.
GRACIAS!!!
Que sabias palabras las de José Samargo, realmente hay que vivir de acuerdo con lo que uno siente, y no hacer lo que “otros” sienten que debemos hacer…A partir de los 40 decidi vivir a la manera de Samargo, y me ha traído muchas gratificaciones en lo personal.
es lo maximo!..gracias .
tu siempre compartiendo cosas hermosas y motivadoras ,gracias por eso…..
Muy bueno=)
No importa cuantos años tengamos, lo importante es esos añ han hecho de nosotros, que nos ha dejado ..más sabiduria seguridad confianza, conocimiento, tolerancia, valorar lo que en verdad tiene valor.
Excelente! Comparto 100% las ideas expuestas aquí …. 🙂
Verdaderamente cierto, y comparto con toda esta reflexión.
hermoso comentario como todos los que exponen me fascinan